Declarado refugio de fauna, especialmente aves, el ecosistema costero de la desembocadura del río Máximo, al norte de la provincia de Camagüey, se abre sobre unos 22 kilómetros cuadrados de marismas y pantanos al borde de la bahía interior de La Gloria. En este apartado paisaje se ubica el más importante sitio de nidificación del flamenco rosado (Phonicopterus ruber ruber) en el Caribe, especie que ha logrado adaptar un magnífico ecosistema a sus necesidades vitales de puesta y cría de sus pichones.Esta ave, que alguna vez estuvo al borde de la extinción ha incrementado su número y en lo actual los especialistas calculan la existencia de unos 200 000 ejemplares en pleno desarrollo.
El ecosistema de la desembocadura del Máximo posee una alta riqueza biológica extendida por siglos, favorecida por constituir un habitad natural de aves y sitio de reproducción compartido con multitud de aves migratorias que hacen larga o prevé escala a su paso sobre Cuba.
Los flamencos del Máximo comparten el área con jutías y con la mayor población del cocodrilo americano existente a lo largo de la costa norte cubana.
El río Máximo, uno de los más importantes del territorio camagüeyano, conforma una extensa red fluvial y se extiende desde su nacimiento, en las proximidades de la loma de Yucatán al centro oriental de la provincia a la bahía de La Gloria, por 66 kilómetros de largo con un caudal medio anual de 162 300 metros cúbicos por año. La cuenca se ubica en la zona tropical lluviosa, con clima de sabana, paisaje donde nace para costear por el este la Sierra de Cubitas y alcanzar el mar.
Las formaciones boscosas se ubican fundamentalmente en las elevaciones de la Sierra de Cubitas y el grupo de Camaján, en las márgenes de ríos y arroyos y hacia la zona costera. Las cuenca posee dos áreas protegidas; el Refugio de Fauna del Río Máximo y la Reserva Ecológica Limones-Tuabaquey.
El área protegida de los flamencos es administrada por la Empresa Nacional para la Protección de la Flora y la Fauna del Ministerio de la Agricultura.
Para la protección ecológica
Al paso del desarrollo socioeconómico de la región, se fomentaron programas hidráulicos y agrícolas, construyéndose embalses y sistemas de siembra.
Esas acciones, si bien trajeron incuestionables mejoras a la población, aparejaron problemas ambientales, incluyendo degradación de suelos, perdida de la cobertura boscosa y de la biodiversidad, problemas que se agravan por inadecuadas prácticas agras técnicas. La salinidad está relacionada también con el mal drenaje y la sobre explotación del manto freático. La debilidad se encuentra en la falta de conocimientos y de capacidad para evaluar las interrelaciones de los componentes de los ecosistemas y las consecuencias ambientales.
En lo actual el Consejo de la Cuenca del Río Máximo organizado por instituciones y organismos de diferentes niveles y grado de responsabilidad en la producción y la ciencia, evalúan periódicamente la situación general de la región manejando y controlando las medidas dictadas para la recuperación y proyectos de desarrollo a corto y largo plazo.
Una principal medida es la de garantizar un gasto ecológico en el río Máximo capaz de mejorar las condiciones ambientales del Refugio de Fauna, creando áreas de bosques con especies que soportan alta salinidad.
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