Durante
el 2012, la Asamblea General de las Naciones Unidas proclamó el 21
de marzo como Día Internacional de los Bosques. La iniciativa
significó un llamado al planeta no solo para la conservación de los
espacios verdes de la Tierra, sino para la protección de todas las
especies vegetales y de cuya presencia depende la vida en general.
El
Día Internacional de los Bosques o Día Forestal Mundial resultó
una recomendación del Congreso Forestal Mundial eferctuado en Roma,
recomendación aceptada por la Organización de Naciones Unidas para
la Agricultura y la Alimentación FAO, El día elegido fue el 21 de
marzo coincide con la entrada de la primavera en el Hemisferio Boreal
y con la del otoño en el Austral.