Mas allá de la aventura el aniversario del Gegem.

 

 Cueva México es el mayor sistema cavernario conocido hasta ahora en la provincia de Camagüey. Contrario a lo que pudiera pensarse no se encuentra en ninguna de nuestras regiones montañosas, sino en la llanura costera del norte. La caverna puede extenderse por mucho más de cuatro kilómetros en salones y galerías espectaculares en al menos dos niveles. Hasta la fecha se conocen de ella 20 bocas todas en forma de pozos que alcanzan alrededor de 40 metros de profundidad,

Al estudio de esta caverna le ha dedicado más de la mitad de sus quince años de vida el Grupo de Estudios Geográficos, Espeleológicos y Medioambientales, Gegem, miembro de la Sociedad Espeleológica de Cuba y oficializado como tal a partir de la expedición Enigma, realizada del 4 al 8 de abril del 2006 a cueva México, la primera expedición de un proyecto de investigación subterránea que aun no cesa.

 

Los océanos de la meteorología.



Los mares que conforman los océanos cubren el 70% de la superficie terrestre y su papel en la historia de la vida en cualquiera de sus formas, de la Naturaleza y aun de la civilización humana es determinante. Por esto y para recapitular sobre un tema que nunca pierde actualidad, la Organización Mundial de las Naciones Unidas ha designado el periodo 2021-2030, como el Decenio de las Ciencias Oceánicas para el Desarrollo Sostenible, etapa que se inicia precisamente este 23 de marzo, Día Meteorológico Mundial.

Si tenemos en cuenta que las temperaturas, corrientes, mareas y vida oceánica en su conjunto constituyen el sistema que hace de la Tierra un lugar habitable para los seres humanos, podemos suponer que del modo en que se protejan y manejen los recursos oceánicos así garantizaríamos vida y equilibrio en la permanente y cada vez más aguda lucha por contrarrestar los efectos del cambio climático. 

Los dos centenarios de la prensa camagüeyana.


El debut de la prensa en Camagüey ocurre en diciembre 1812 apenas se instala la primera imprenta en la villa para que El Espejo comenzara a circular. A partir de allí se inician 200 años de periodismo que en función de profesión ha navegado por todos las vicisitudes de un oficio tan llevado y traído.

Es en el 1821 cuando la prensa local en una difícil época, emprende en su despegue en el curso de aquellas históricas rebatiñas entre constitucionalismos monárquicos y despotismo colonial, sin que ninguna de las dos corrientes políticas en España con repercusiones en Cuba, aportara nada que valiera la pena a muestro país.

La prensa periódica tomó desde entonces en Camagüey un auge extraordinario en una población que se las daba de culta e independiente de la corona hasta cierto punto, sin embargo, la excitación parece por la llegada de imprentas provoco otros lloros y en vez de promover la cultura, proponer mejoras administrativas y ofrecer informaciones de las artes y la economía en desarrollo, proliferaron denuncias y acusaciones contra funcionarios públicos y personalidades, entrometimientos en pleitos particulares y cuestiones familiares, materias que servían de pasto a un elevado numero de dimes y diretes que inclinaron a muchos lectores a rechazar los periódicos colocando en duda la utilidad de las imprentas. 

El sueño de la Naturaleza salvaje



Satelite era pequeño gato que de travieso y sin nadie saber cómo, subió a un inmenso árbol del que luego no supo bajar. Un día y una noche se las paso maullando buscando auxilio. No faltaba mas, la comunidad movilizó el rescate entre estudiantes de una escuela próxima, maestros, jugadores de un equipo de fútbol que practicaba en las cercanías y si no llegaron los bomberos fue porque finalmente el animalito me fue devuelto asustado y escarmentado de la aventura que no volvió a repetir. En su tiempo publique una crónica sobre ese evento porque acciones como aquellas no se olvidan.

Trucutú fue un imponente perro ”de monte” con raza indefinida de ojos zarcos y fieros. El nombre encajaba perfectamente a su figura. En alguno de nuestros campamentos cubiteros se nos unió llegado no sabemos de donde y juntos al grupo anduvo y desanduvo muchos de los caminos bajo tierra. Tanto se empeñó que fue necesario confeccionarle un arnés para hacerlo descender a profundas simas y aun recorrer kilómetros de galerías sin la menor muestra de temor. En cierta oportunidad, ante el titubeo de un equipo de trabajo que perdió el rumbo, Trucutú les condujo directamente a la superficie. Que recordemos nunca se olvido de regresar al campamento por distante que estuviéramos.