Foto: Otilio Rivero Delgado
En Camagüey la licenciada en física del Centro de Ingeniería Ambiental de Camagüey (CIAC) Kenia Adela Ramos Espinosa, lleva adelante el “Proyecto de técnicas nucleares y conexas a la caracterización de las principales cuencas de agua subterránea de la provincia de Camagüey”, un tema nada común cuyo objetivo es el de identificar y clasificar las cuencas de abasto de agua subterráneas más importantes del territorio con el uso de la energía nuclear.
Aseguran los especialistas que las condiciones topográficas e ingeniero geológico de la provincia de Camagüey son desfavorables para aprovechar el agua que corre libre por la superficie de la tierra.
Primero porque en la mayoría de los ríos es difícil encontrar lugares adecuados para la construcción de embalses, unos porque no tiene caudal suficiente y otros porque se hallan sobre zonas de rocas calizas carstificadas con agrietamientos, sumideros y áreas cavernosas.
Sucede también que los recursos de las aguas superficiales en la provincia están distribuidos muy irregularmente, con mayor concentración de los ríos más caudalosos hacia el sudeste y el noreste del territorio.
Otras cuencas hidráulicas que desde hace mucho tenemos en cuenta para compensar esos contratiempos naturales, son las de las aguas subterráneas, que constituyen un recurso natural de extraordinario valor, ya que el acuífero del subsuelo contribuye a compensar los déficit superficiales. Calculan los hidrogeólogos que el potencial acuífero subterráneo de nuestra provincia, una gran parte de la cual se destina a la población y la economía, gira en torno a los 348,3 millones de metros cúbicos, distribuidas también de forma irregular pero con déficit acusados hacia el centro y el norte del territorio.
¿Cuanta agua necesitamos?
Hasta ahora entre los principales consumidores de aguas de las obras hidráulicas superficiales, se encuentra el regadío agrícola. Según datos, las normas brutas de riego en nuestra provincia se diferencian entre las partes nortes y sur de la geografía, pero en su conjunto aparece conque el cultivo y laboreo de la caña de azúcar, por ejemplo, requiere alrededor de 17 000 metros cúbicos por hectárea y los pastos se van por encima de los 18 000 mil., lo que nos da una dimensión del gasto que se necesita solo para el desarrollo de una parte del sector agropecuario, sin incluir industrias, comunidades e instalaciones sociales.
Cuando el recurso hídrico de superficie se reduce, el agua subterránea compensa la merma, aunque su explotación no siempre es tan fácil o su volumen apenas nos sea conocido, asi como las normas en su tasa de explotación.
Para que nos lleguen los rayos cósmicos.
En lo actual el manejo de las aguas del subsuelo persigue utilizar el agua subterránea de manera que se alcance un estado de equilibrio en su existencia, tanto en cantidad como en calidad, incluyendo en ello la previsión de las tasas de renovación del manto subterráneo y de extracción, la dinámica del acuífero y por los impactos potenciales de contaminación natural o a causa de irresponsabilidades humanas. Solo el estudio de métodos prácticos para su manejo sostenible podrá preservar esos recursos en índices de disponibilidad, demanda y calidad.
Una técnica moderna y precisa para alcanzar estos grados de eficiencia para los estudios de las aguas subterráneas, es la medición de la composición isotópica de los átomos de oxigeno presentes en las moléculas del agua, también se incluyen estudios del análisis de la concentración de trítio, un isótopo radioactivo del hidrogeno, producido por la interacción de los rayos cósmicos con los componentes de la atmósfera --La hidrología isotópica es una rama de la hidrología encargada de identificar el origen del agua y conocer los procesos de mezcla entre las aguas superficiales y subterráneas; esta es una técnica que nos coloca en una posición avanzada para el uso de la energía nuclear para la paz-- señala la licenciadas Kenia Adela Ramos.
Este programa de investigación de las aguas del subsuelo que se lleva ejecuta en Camagüey es parte de la cooperación técnica facilitada por el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), entidad de las Naciones Unidas que tiene, entre otros, el objetivo de facilitar información y transferir tecnología para la aplicación pacífica de la energía nuclear. El proyecto de estudio del CIAC persigue en lo esencial caracterizar las principales cuencas hidrográficas subterráneas de la región de Camagüey desde el punto de vista físico, químico e hidrodinámico para establecer un seguro modelo de comportamiento…
Hasta la fecha, la explotación de los acuíferos subterráneos en Cuba no poseen regulaciones muy estrictas, basta la necesidad para que se realicen perforaciones y se fabriquen pozos sin ton ni son, y todo sin que de por medio se exija en rigor un permiso especial o el estudio específico para dictaminar capacidad de carga, calidad o norma de bombeo máximo en cada caso particular, tampoco se observan responsabilidades en las normas constructivas para los pozos o formas para evitar la contaminación de las aguas subterráneas o la mezcla no deseada de las aguas de diferentes estratos.
La aplicación en Cuba de la energía nuclear a favor de la sociedad, como se proponen demostrar los estudios del CIAC, representa no solamente un logro científico, sino un noble e importante paso hacia el desarrollo de la vida y con ello la capacidad de lucha por la protección medioambiental.
Primero porque en la mayoría de los ríos es difícil encontrar lugares adecuados para la construcción de embalses, unos porque no tiene caudal suficiente y otros porque se hallan sobre zonas de rocas calizas carstificadas con agrietamientos, sumideros y áreas cavernosas.
Sucede también que los recursos de las aguas superficiales en la provincia están distribuidos muy irregularmente, con mayor concentración de los ríos más caudalosos hacia el sudeste y el noreste del territorio.
Otras cuencas hidráulicas que desde hace mucho tenemos en cuenta para compensar esos contratiempos naturales, son las de las aguas subterráneas, que constituyen un recurso natural de extraordinario valor, ya que el acuífero del subsuelo contribuye a compensar los déficit superficiales. Calculan los hidrogeólogos que el potencial acuífero subterráneo de nuestra provincia, una gran parte de la cual se destina a la población y la economía, gira en torno a los 348,3 millones de metros cúbicos, distribuidas también de forma irregular pero con déficit acusados hacia el centro y el norte del territorio.
¿Cuanta agua necesitamos?
Hasta ahora entre los principales consumidores de aguas de las obras hidráulicas superficiales, se encuentra el regadío agrícola. Según datos, las normas brutas de riego en nuestra provincia se diferencian entre las partes nortes y sur de la geografía, pero en su conjunto aparece conque el cultivo y laboreo de la caña de azúcar, por ejemplo, requiere alrededor de 17 000 metros cúbicos por hectárea y los pastos se van por encima de los 18 000 mil., lo que nos da una dimensión del gasto que se necesita solo para el desarrollo de una parte del sector agropecuario, sin incluir industrias, comunidades e instalaciones sociales.
Cuando el recurso hídrico de superficie se reduce, el agua subterránea compensa la merma, aunque su explotación no siempre es tan fácil o su volumen apenas nos sea conocido, asi como las normas en su tasa de explotación.
Para que nos lleguen los rayos cósmicos.
En lo actual el manejo de las aguas del subsuelo persigue utilizar el agua subterránea de manera que se alcance un estado de equilibrio en su existencia, tanto en cantidad como en calidad, incluyendo en ello la previsión de las tasas de renovación del manto subterráneo y de extracción, la dinámica del acuífero y por los impactos potenciales de contaminación natural o a causa de irresponsabilidades humanas. Solo el estudio de métodos prácticos para su manejo sostenible podrá preservar esos recursos en índices de disponibilidad, demanda y calidad.
Una técnica moderna y precisa para alcanzar estos grados de eficiencia para los estudios de las aguas subterráneas, es la medición de la composición isotópica de los átomos de oxigeno presentes en las moléculas del agua, también se incluyen estudios del análisis de la concentración de trítio, un isótopo radioactivo del hidrogeno, producido por la interacción de los rayos cósmicos con los componentes de la atmósfera --La hidrología isotópica es una rama de la hidrología encargada de identificar el origen del agua y conocer los procesos de mezcla entre las aguas superficiales y subterráneas; esta es una técnica que nos coloca en una posición avanzada para el uso de la energía nuclear para la paz-- señala la licenciadas Kenia Adela Ramos.
Este programa de investigación de las aguas del subsuelo que se lleva ejecuta en Camagüey es parte de la cooperación técnica facilitada por el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), entidad de las Naciones Unidas que tiene, entre otros, el objetivo de facilitar información y transferir tecnología para la aplicación pacífica de la energía nuclear. El proyecto de estudio del CIAC persigue en lo esencial caracterizar las principales cuencas hidrográficas subterráneas de la región de Camagüey desde el punto de vista físico, químico e hidrodinámico para establecer un seguro modelo de comportamiento…
Hasta la fecha, la explotación de los acuíferos subterráneos en Cuba no poseen regulaciones muy estrictas, basta la necesidad para que se realicen perforaciones y se fabriquen pozos sin ton ni son, y todo sin que de por medio se exija en rigor un permiso especial o el estudio específico para dictaminar capacidad de carga, calidad o norma de bombeo máximo en cada caso particular, tampoco se observan responsabilidades en las normas constructivas para los pozos o formas para evitar la contaminación de las aguas subterráneas o la mezcla no deseada de las aguas de diferentes estratos.
La aplicación en Cuba de la energía nuclear a favor de la sociedad, como se proponen demostrar los estudios del CIAC, representa no solamente un logro científico, sino un noble e importante paso hacia el desarrollo de la vida y con ello la capacidad de lucha por la protección medioambiental.
No hay comentarios:
Publicar un comentario